El 68 la revolución que evoluciona
Los movimientos estudiantiles de hace cincuenta años no han concluido se mantienen en la misma transformación de la vida, y aunque ahora pareciera que el control se mantiene en la cancha del conservadurismo los jóvenes siempre serán el motor de cambio
Por Mario Díaz (El Master)
Casi recién desempacado de España, afable, sonriente, dispuesto al saludo pronto, Joaquín Estefanía Moreira, activista estudiantil del movimiento del 68 en Europa y periodista de muchos años del periódico El País en el cual llegó hasta la dirección, asevera que pese a que aparenta lo contrario esta lucha no ha sido un fracaso, por el contrario aún se mantiene en pie de lucha y transformándose.
“Creo que si hubiera que hacer un balance de lo que ha ocurrido en estos cincuenta años partiendo del año 68, podemos decir que no ha cambiado el mundo pero si ha cambiado la vida y en este sentido no se puede considerar un fracaso.
“Básicamente en el libro mencionamos tres momentos lo que ocurrió en París, lo que ocurrió en Checoslovaquia y lo que ocurrió en México que políticamente tuvieron poca relevancia en el transcurso de los años, pero lo que ahí se vivió como el cambio de costumbres, elementos tan importantes en estos momentos para la vida de todos los ciudadanos como son el feminismo, ecologismo, el antiimperialismo, pacifismo todos estos temas parten de estos años y por consiguiente si uno hace un balance a largo plazo se puede decir que aquel año fue un año mágico que ha tenido bastante relevancia”.
Para Estefanía Moreira quien presentará su más reciente libro Revoluciones, Cincuenta años de rebeldía (1968-2018) bajo el sello editorial Galaxia Gutemberg, argumenta que el 68 no ha concluido sino que permanece en un constante ciclo de reconstrucción y adaptación.
“Muchos de esos temas que aparecieron en el año 1968, recordemos que hacía pocos años que el mundo había salido de la segunda guerra mundial era un mundo en blanco y negro donde los principales los temas que se trataban eran los de la distribución, con la lucha de clases. En este año emerge como un nuevo sujeto protagonista que es la juventud y que lo que quiere hacer de ese mundo mediocre gris es que se convierta en un mundo lleno de color y entonces emergen todos estos temas de los que hablé siguen vigentes incorporándose poco a poco en la vida cotidiana”.
La periodista Denise Dresser se acerca Estefanía todo un caballero no pude ignorar el saludo y algunas palabras cordiales, previo a solicitar una pausa a la entrevista, quedan en hacer un espacio en sus agendas para seguir la charla y el intercambio de anécdotas e historias.
Sobre el comportamiento de la juventud actual que por momentos parece desaparecer de este protagonismo que bien se ganó en aquel 1968 detalla.
“Hace todavía siete años en el 2011 los jóvenes de todo el mundo protagonizaron un movimiento de Los Indignados que tuvo mucha relevancia en mi país y en otros países de América latina, en Estados Unidos el movimiento Ocupo en Wall Street que era completamente impensable ver este tipo de reclamo, hasta tal punto que una persona de este movimiento Bernie Sanders es la persona que luego compite con Hilary Clintón para las primarias del partido demócrata, entonces tuvo mucha relevancia.
“Este movimiento se encuentra en este momento en horas bajas, no tiene este poder de movilización pero siete años son muy pocos para la historia no se pueden hacer valoraciones en tan poco lapso, puede volver a emerger en cualquier caso en este momento están en reflujo porque lo que está ocurriendo en estos momentos es una reacción “reaccionaria”, muy importante que se manifiesta en la presencia de Trump en Estados Unidos y en Jair Bolsonaro en Brasil y la presencia de tantos partidos de extrema derecha en el mundo y que al momento que está ocurriendo una de estas vueltas”.
Señala que lo que dice en su más reciente libro es que por el momento los que aparentan tener el control del balón y del partido son los conservadores, pero en este juego toma importancia la tercera ley del movimiento de Newton, a cada acción corresponde una reacción.
“Esto ha ocurrido en esos 50 años del 68, así llegan Ronald Reagan (Estados Unidos) y Margaret Thacher (Inglaterra) al poder y se produce la primera fuerza de la revolución conservadora. Después del movimiento antiglobalización de finales del siglo pasado y principios de este llega a la Casa Blanca George Bush junto con los conservadores y después del movimiento de los indignados en todo el mundo llega Donald Trump.
Sobre quién disfrutaría esta lectura, Estefanía Moreira, licenciado en Ciencias Económicas y en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid reconoce con alegría que primero se trató de una valoración hacia su generación pero que en el camino descubrió la integración de las nuevas generaciones.
“Cuando me puse a escribirlo pensaba en dos tipos de gentes las de mi edad porque había que hacer una valoración de lo que había pasado en estos años, entré a la universidad en el 68 y me he jubilado en este movimiento reaccionario que estamos viviendo.
“Mi generación es quizá la mejor tratada de la historia porque nosotros no hemos vivido ninguna guerra como nuestros padres y nuestros abuelos. Nosotros más o menos con todas las dificultades hemos vivido con puestos de trabajo normales, cuando teníamos una dificultad teníamos un pequeño estado de bienestar que nos protegía, esto ya no ocurre el día de hoy, ahora los jóvenes tienen dificultades para tener trabajo y para tener protección y bien social. Entonces por una parte mi público era mi generación para decirles somos unos privilegiados muchos de los líderes del 68 han sido primeros ministros, catedráticos, directores de medios de comunicación y otro público fueron los que no conocieron lo que ocurrió en el 68 y que creen que lo que están haciendo es la primera vez que ocurre en la historia”.
El 68 de México
Finaliza reconociendo que si uno hace un balance del año 1968 “realmente en el lugar donde hubo mucho más represión en todas partes del mundo fue aquí en México con la matanza de Tlatelolco, la cantidad de muertos, heridos y desaparecidos y detenidos que hubo”, de ahí que este movimiento continúe tan vigente en este país impregnado en la memoria de los mexicanos.